Herencias moriscas
Una idílica ciudad de montaña
La magnífica localidad morisca de Valldemossa está flanqueada por la imponente montaña es Teix y rodeada por montañas, huertos de olivos y limoneros y verdes praderas.


El oído absoluto.
En el pasado, innumerables escritores y músicos ilustres fueron atraídos por la belleza natural de Valldemossa. Algunos de ellos fueron Jorge Luis Borges, el poeta nicaragüense Rubén Dario, y por supuesto, Federico Chopin, quien en 1838 pasó un desagradable invierno en el monasterio de La Cartuja de la ciudad, en compañía de su amante francesa, George Sand. Chopin sufría de tuberculosis y había venido a la ciudad para disfrutar del aire de la montaña pero se encontró con las celdas de los monjes sin calefacción. ¡Qué frío!
A pesar de su enfermedad, Chopin compuso sus preludios al piano que había mandado enviar al monasterio. Aún puede verse hoy en día. George Sand escribió Un Invierno en Mallorca, unas memorias bastante mordaces y sin embargo, llenas de hermosas descripciones acerca del paisaje local, tan fascinante y cautivador como hoy en día.

Piratas, cocas de patata y santos.
En tiempos antiguos, el pequeño puerto de Valldemossa al que hoy se llega por una sinuosa carretera, era frecuentemente atacado por piratas. De ahí que se crearan atalayas para alertar a otras localidades de la costa. Casi tan famoso como su patrimonio morisco y sus piratas, es Catalina Thomàs, la patrona de Mallorca, que nació en la ciudad. Quizás lo que más aman de Valldemossa los visitantes son sus deliciosas cocas de patata, una creación de la panadería de c'an Molinas. Se puede tomar este bollo esponjoso espolvoreado con azúcar con un chocolate caliente en la terraza del café.

Cerca del pueblo de Deià, a tan solo 17 km de Palma y a 40 minutos por carretera del aeropuerto de Palma. Con excelentes servicios, un centro de arte creado por el actor norteamericano Michael Douglas, y un ambiente alegre y acogedor con pequeñas y encantadoras tiendas, cafés y restaurantes que hacen de Valldemossa el lugar perfecto para descansar y relajarse en un entorno verdaderamente natural.
Por último, pero no menos importante.
¿Sabía usted que Valldemossa se remonta a épocas árabes y se deriva del nombre de un noble Árabe llamado Mussa? Significa Valle de Mussa.
El archiduque Luis Salvador visitó Mallorca por primera vez en 1867. Restauró muchas propiedades entre Valldemossa y Deià, entre las cuales encontramos Son Marroig y el monasterio de Miramar.

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G. Goudy